Todo paso hace mucho tiempo, tanto q no se recuerda con exactitud en qué año pasó. En el seno de una familia un tanto humilde nació una niña, la cual llamaron Erika, su infancia transcurrió normal, como la de cualquier otra niña, exceptuando que ella no tenia mas hermanos, quizás algo curioso en aquella época, ya que las familias solían ser más numerosas, la verdad siempre se sintió un poco sola, así que un buen día se dedico a subir a una montaña, la llamaban la puerta del cielo, quizás por las leyendas que de ella se contaban, había quien aseguraba haber visto a ángeles, otros que habían visto a la virgen, aunque también decían que nadie en la actualidad los había visto, la verdad es que ella iba allí dos o tres veces en la semana, le gustaba pensar, imaginar un futuro en el que estuviera rodeada de niños, de un buen marido, esa era su única ilusión, y con esa petición volvía de nuevo a su casa, allí la esperaban sus padres, y alguna vez se ganaba alguna reprimenda de sus padres, estos aun creyendo en la leyenda d esos espíritus ella respondiéndole que llevaba algunos años yendo allí y que jamás había visto nada, quizás el ansia de ver, es lo q a ella le cegaba, y la verdad es que solo buscaba un lugar tranquilo, donde solo la molestaran los silbidos de los pájaros cantándola llamándose el uno al otro, ella seguía en su mundo de sueño, el tiempo transcurría pero ella seguía yendo y cada vez con más frecuencia a ese sitio, hasta que un día se encontró a alguien de allí, no, no era un anguilera un vecino de ella que viendo las idas y venidas de Erika a la montaña un día decidió ir hasta allí, quería preguntarle por qué pasaba tanto tiempo allí, que si la leyenda era cierta y se reunía allí con los ángeles, hola Erika que tal estas? Erika soltó una sonrisa, estoy bien Manuel ¿y tú qué? , ¿Qué haces por aquí? Manuel respondió que llevaba mucho tiempo viendo los paseos de ella hacia la montaña, muchos amigos hablaban de eso, y se preguntaban si habías visto algo relacionado con la leyenda, jajaja, de verdad Manuel crees eso? no he visto nada en todo este tiempo, solo vengo a buscar tranquilidad, me encanta oír a los animales, pensar en un futuro lleno d hijos, je ,je, la verdad es lo que le pido a la montaña, pero no porque creo en eso, quizás haya un mas alaguna vida eterna, todo puede ser, pero en la soledad y en la paz que encuentro aquí, pues no sé, me hace hablar con la montaña, pues ya ves Erika todos estábamos no sé si preocupados, asustados, o quizás un poco de todo, pero ya veo que vienes buscando tranquilidad, paz, y aunque la montaña no te de más de lo q tú crees, hablas con ella como si fuera tu propio ángel, oye y ya has buscado a la persona con la q quieres ser feliz y tener esos hijos? Ja,ja,ja Manuel, vaya pregunta me haces, todos tenemos una idea de esa persona, la que te hará feliz, pero el hombre aun no le he visto, y ya sabemos que en estos sitios tarde o temprano acabaremos con un vecino, aunque también te digo que los hombres que viven aquí seguro q me harían feliz, no crees? Puede ser le dijo Manuel, bueno Erika que está oscureciendo, ¿vamos para el pueblo? si Manuel vamos, oye Erika ¿puedo venir mañana contigo? La verdad es que la paz que se respira aquí es envidiable y me siento muy a gusto contigo, jajá oye Manuel a ver si te estás enamorando de mi? jajá no, no, mujer como dices eso, le respondió un Manuel enrojecido, esa fue su primera toma de contacto en la montaña, Manuel se fue uniendo a Erika, iban a diario, ya la petición de una vida con hijos no era solo de Erika, Manuel quizás sin querer se iba sintiendo atraído por la idea de tener hijos, de hacer feliz a una mujer y hacerla sentir la mujer más amada del mundo, y poco a poco vio como esa mujer no era otra q Erika, sus miradas decían más que sus palabras, sus deseos eran mayores que al temor de q realmente allí existieran ángeles, que pudieran observarlos, pero Manuel sentía el miedo de que lo que sintiera Erika solo fuera afecto de amigo, quizás subido en una nube, metido en otro mundo y sin miedo a nada, hizo su petición a la montaña, deseaba ser amado por Erika, y su corazón hablo por él, oye Erika, dime Manuel, te acuerdas de la primera vez q nos vimos aquí? pues claro Manuel, hace ya más de un mes, m preguntaste si m estaba enamorando de ti, y yo t respondí q no, a ver Manuel, que m quieres preguntar, bueno que yo te respondí q no, pero la verdad es q la cosa ha cambiado mucho, y ahora t puedo decir con total seguridad que me he enamorado de ti, no sé si ha sido la montaña, los ángeles que dicen que habitan aquí o la paz que siento a tu lado, Erika lo miro a los ojos y su respuesta fue, Manuel ante esta montaña has declarado tu amor ,y lo beso, Manuel se quedo mudo, y Erika solo le pidió una condición, Manuel hoy sellamos nuestro amor, pero me tienes q prometer q vendremos a esta montaña cada aniversario, Manuel dijo, pues claro, es nuestra montaña, nuestra paz, y nuestro testigo, la pareja formalizo su compromiso besando a la montaña, y allí empezó a surgir su unión con la misteriosa montaña, una boda por todo lo alto y sus citas en el mismo sitio cada mes, hasta ahora habían conseguido parte de sus sueños, pero aun los niños no llegaban, y no sabían por que, quizás su deseo no se podría cumplir? aunque ellos no se desesperaban, ya que tarde o temprano obtendrían el fruto de su amor, y así fue, Erika quedo embarazado, la noticia cayó como lluvia en tiempos de sequia, y sin saber por qué se fueron corriendo a la montaña a celebrarlo, lo mostraron a lo q la leyenda llamaba las puertas del cielo, Manuel nuestro hijo se llamara Ángel, porque quizás si existen ángeles aquí pero no logramos verlo, Manuel estaba de acuerdo con el nombre, sus sueños se iban cumpliendo, aunque le faltaban hijos, pero ya habían roto el hielo, su primogénito ya estaba entre sus brazos y según ellos había alguien o algo q los protegía y como no, sus visitas a la montaña se seguían sucediendo, la gente del pueblo no entendía porque iban tanto a esa montaña, ya que ellos quizás sentían mucho respeto hacia ella, pero eso era algo q a Erika y Manuel no les importaba, ellos habían conseguido allí su felicidad, su unión, y como no, su hijo, sentían la necesidad de ir, hasta q un día enfermaron, la noticia fue un jarro de agua fría para todos, eran persona jóvenes, llenos de vida, de ilusiones, con ganas de vivir, pero ellos, incluso enfermos seguían yendo a las puertas del cielo, hasta que un día dejaron a Ángel, su hijo, con los abuelos y subieron solos, querían disfrutar una vez mas de la soledad y la paz de la montaña, no querían llevar a Ángel, quizás porque creían que aun era pequeño, se despidieron de él y se fueron rumbo a su cita con las puertas del cielo, allí se pusieron a recordar todo lo vivido desde la primera q vez en q coincidieron, nadie más supo de ellos, no los volvieron a ver, y en un alarde de valentía el pueblo se unió en la búsqueda de la tan feliz pareja, durante días lo intentaron, pero su búsqueda no dio frutos, Erika y Manuel habían desaparecido, como si se los hubiera tragado la tierra, nadie entendía lo sucedido, no podían ir lejos a causa de la enfermedad y si hubieran muerto sus cuerpos estarían allí, al pie de la montaña, ha pasado ya mucho tiempo de eso, pero hay quien cuenta q los q han vuelto a ir a la montaña han visto a dos ángeles q se les presenta y que les cuenta q la montaña es el inicio de una vida llena de felicidad, y paz......... serán Erika y Manuel los dos ángeles que les proporciona la felicidad a los q ha día de hoy se reúnen allí?
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